lunes, 4 de julio de 2011
Tú eres responsable de tu propio triunfo
A menudo escuchamos a compañeros diciendo: “yo soy una simple secretaria o empleado”, “yo soy incapaz de soñar…”, “yo soy pobre”…para qué voy a pensar en eso si está tan lejos... Pobre pero contento....¿Cómo vas a estar contento conformándote con tan poco?
¡Tú te impones tus propias limitaciones! Así mismo, cuando te convences de que puedes, logras todo lo que piensas que puedes lograr.
Es increible como nos llenamos de energía cuando creemos firmemente en que podemos lograr algo. Nuestro cuerpo y nuestra alma se transforman. Nos enfocamos y utilizamos todas las herramientas conocidas y desconocidas para lograr nuestro propósito.
Cuando realizamos nuestra meta nos inunda una sensación de logro y de poder que se convierte en algo maravilloso. Mejora nuestra autoestima, nos sentimos diferentes con nosotros mismos y hasta mejoran milagrosamente las relaciones con los demás.
Nos creemos las reinas y los reyes del mundo y ¿sabes qué? Realmente lo somos.
Todos tenemos un ganador dentro de nosotros mismos y está esperando que le des permiso a salir. Pero solo tú eres el que puedes hacerlo, nadie te dará la motivación que esperas de la forma que la esperas. El Poder está dentro de ti y solo tú tienes la llave.
La empresa donde trabajas te podría estar ofreciendo incentivos de distintas clases y, quizás, tú ni siquiera los hayas considerado motivantes. Lo que te impulsa puede ser distinto de lo que motiva a otros. Habla, expresa lo que deseas, sé específico pero acuérdate de tener tacto al plantearlo, gotitas del saber...
Busca en tu interior y afirma lo que eres, una ganadora o un ganador, un profesional en todo el sentido, un ser humano excepcional en todas las áreas de tu vida.
¡ERES UN ÉXITO!
• Mírate al espejo y regálate una sonrisa…sin miedo y sin humildad, date cuenta del maravilloso ser humano que hay en tí.
• Dilo cuando te levantas, mientras guías, antes de encontrarte a tu jefe y al compañero de trabajo menos inspirador, cuando llegas a tu hogar y cuando te vas a acostar a dormir.
• Crea relaciones armoniosas con tus compañeros de trabajo, piensa positivo de ellos (aunque a veces esta labor te dé mucha dificultad…)
• Si quieres que te saluden, saluda tú primero y verás la magia develarse ante ti.
• Recuerda en todo momento que lo “negativo” que puedas percibir es una oportunidad para crecer y aprender.
Eres la espina dorsal de tu empresa, eres lo más grande e importante que posee tu jefe y tu departamento. Piensa positivo de ti en todo momento y ofrece lo mejor de tu persona a los demás. Sin siquiera darte cuenta estarás contribuyendo a fomentar una mejor calidad de vida en tu trabajo y en tu hogar.
Tu éxito comienza desde el momento en tú lo decides y el momento es Ahora Mismo. Te darás cuenta que eres responsable de tu Propio Triunfo… Date a ti mismo apoyo moral y Disfrútalo.
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